Tecnología y Pandemia: los dos condimentos que han subido los voltajes de la innovación

La pandemia ha hecho que la tecnología avance de manera frenética. Ambos elementos combinados han sido decidores en cuanto a los cambios que las empresas han necesitado hacer y necesitan para continuar siendo competitivas. Existen cuatros vertientes que de una manera u otra muestran la importancia del rol que hoy la tecnología está jugando. Estas vertientes son: La adopción casi total del teletrabajo, la aceleración de la transformación Digital producto de la automatización de procesos y nuevas tecnologías, el alza de recursos en la innovación para hallar nuevos modelos de negocio, y el crecimiento exponencial del E-Commerce. Aquí los revisamos uno por uno.

La dinastía del teletrabajo

Durante la crisis por la covid-19, el salto al trabajo remoto ha sido avasallador y la tecnología ha sido el gran motor de este cambio. Las grandes empresas tecnológicas están siendo ya las pioneras en el salto definitivo al teletrabajo post-crisis. Al hilo de la experiencia vivida durante la crisis del coronavirus, Twitter va a dejar que sus empleados trabajen desde casa siempre y, como le explicaba su responsable de recursos humanos a BuzzFeed, han asumido que los modos de trabajo ya no volverán a ser los mismos que antes. Un par de semanas más tarde, Facebook anunciaba un movimiento similar. Ellos también van a potenciar el teletrabajo, incluso en la vuelta a la normalidad tras la pandemia. A diez años vista, esperan que la mitad de sus 45.000 empleados trabajen desde sus casas de forma habitual.

La  TxD capta la atención de los forasteros digitales

Hace años hablar de transformación digital en empresas era algo opcional, pero en tiempos de pandemia se ha convertido en una necesidad para la supervivencia de las organizaciones. Y es que con la irrupción de la pandemia se agilizaron los esfuerzos digitales en muchas funciones que antes eran manuales. La revolución tecnológica que ya venía a paso agigantado antes de COVID19, sumado a las urgencias en las que ha derivado, han hecho que este proceso de transformación no se haya visto con anterioridad.

Esta nueva transformación digital ha evidenciado una velocidad de expansión consistente en donde hay cifras que son decidoras. Según los resultados de una encuesta realizada por Corfo, la Cámara de Comercio de Santiago y la consultora PMG, en el 2020 las pymes y empresas chilenas aumentaron su transformación en 50 puntos dentro de una escala de 0 a 100. Otra cifra interesante es que en 2019 el 44% de las empresas alcanzaba niveles de desarrollo de “Principiante Digital” o “Analógico”, mientras que en el 2020 esta cifra se redujo a solo un 32%.

 Modelos de negocio, un  Brainstorming con harta cafeína

Sin duda la pandemia cambió la manera en cómo las personas satisfacen sus necesidades en cuanto a lo que compran y los canales de adquisición de los bienes. El entorno actual está marcado por grandes cambios en la tecnología, las preferencias de los consumidores y los canales de venta. Como siempre ha ocurrido en todas las crisis, el ingenio a la hora de crear nuevas formas de vender o de comunicarse con los clientes será una ventaja diferenciadora. La creatividad ya ha permitido a muchas empresas replantear nuevas formas de producir con monitoreo remoto y la incorporación de robots.

El cercano y siempre oportuno E-Commerce

La pandemia ha propiciado un giro de 180 grados en muchas áreas tanto laborales como sociales y también en los hábitos de consumo. Los usuarios han interiorizado en este periodo nuevas formas de adquirir bienes y servicios por lo cual los consumidores vienen con un tranco “sobre revolucionado” en todo lo que es el comercio online.

El rol de nuevas plataformas digitales de E-Commerce ha sido fundamental en los meses más críticos de la pandemia. El repentino boom de compras por canales digitales hizo que el sector creciera exponencialmente. En América latina el comercio electrónico pasó de 126 millones de compradores a más de 267 millones, con todos los cambios en los hábitos de consumo que el contexto propició.

Sin duda la pandemia ha sido un catalizador para que la tecnología penetre de manera definitiva en gran parte de la vida de las personas, y en ese sentido  ha hecho que las empresas no tan grandes tengan la oportunidad de mejorar el rendimiento e introducir cambios hacia la digitalización.